Premio Ciudadanía Empresaria Amcham: Caso Xinca, Nuevo Paradigma Empresario 2018

Xinca es una empresa mendocina que desde el 2013 se propuso la idea de convertir la basura en oportunidades. Es así que producen calzado urbano reciclando basura en pro de un cambio ambiental y social. Conforme a su objetivo trabajan con organizaciones sociales, rurales y personas privadas de su libertad creando conciencia y reinserción laboral.

Ganadores de la edición 2018 del premio Ciudadanía Empresaria de Amacham en la categoría NUEVO PARADIGMA EMPRESARIO Xinca fue reconocida por el modelo de negocios de empresas disruptivas en su lógica de creación de valor que, además de generar la necesaria remuneración del capital invertido, generen, a través de sus acciones,  valor para la sociedad, las personas y respeten la integridad de los ecosistemas.

En esta entrevista, Alejandro Malgor, Socio fundador, profundiza acerca del valor de haber participado en el premio y como este es un factor de reconocimiento para sus públicos de interés.

IS: ¿Por qué vieron que era una oportunidad para su emprendimiento participar en el Premio? 

Alejandro Malgor: El premio nos permite que más personas y empresas conozcan nuestro trabajo. Desde hace 2 años que Xinca ha sumado una nueva unidad de negocio: indumentaria de trabajo.

Para confeccionar esta línea de ropa de trabajo, elegimos trabajar con los que menos oportunidades tienen.

Nos interesa que las empresas y personas sepan que, al comprar nuestros productos, se transforman en nuestros aliados. En definitiva, nos ayudan a empoderar a mujeres y personas excluidas del sistema.

Buscamos que las empresas que son parte de AmCham nos elijan a la hora de comprar ropa de trabajo. Que nos sumen en su cadena de suministros.

IS: ¿Qué aspecto de su negocio consideraban como un valor para estar dentro del certamen?

A.M: Definitivamente somos una empresa protagonista de la nueva economía, que proponemos hacer negocios de una manera disruptiva, generando valor económico, social y ambiental de manera equivalente.

IS:¿Cómo fue el proceso de participación, necesitaron asesoramiento lo hicieron?

A.M: Fue un proceso simple. El premio AmCham es un premio que nos da la posibilidad a empresas de la ¨nueva economía¨ de sentarnos en la misma mesa que las grandes corporaciones.

IS:¿Cómo impacto el galardón en el negocio, en la comunicación, en el publico interno y en sus públicos de interés?

A.M: Primero nos permitió conocer gente que trabaja dentro de AmCham que realmente quiere potenciarnos y que lideremos un cambio de paradigma.

Por otro lado, nos permitió iniciar conversaciones sobre compras “verdes, inclusivas o éticas¨ con la red de empresas que forman parte de AmCham.

Con algunas de ellas ya estamos trabajando. Newsan nos invitó a sumarnos a su Programa de ComprasInclusivas.

De esta manera, nos convertimos en proveedores de Newsan para desarrollar la indumentaria de trabajo para los colaboradores de la empresa que desarrollan actividades en sus plantas productivas. Los uniformes fueron realizados por mujeres rurales. Esto permite que estas mujeres sean reintegradas, logrando favorecer por acción conjunta su inclusión económica sostenible.   

IS: Como están haciendo frente a la situación actual. (COVID-19)

A.M: Frente al contexto, cambiamos el eje de producción. Primero intentamos ayudar a hospitales con la entrega de camisolines, pero enseguida nos dimos cuenta de que los barbijos era lo que se necesitaba con más urgencia. 

Nos replanteamos el uso de los barbijos descartables. Por eso, proponemos tapabocas lavables y reutilizables, lo cual los hace más amigables y sustentables con el planeta.

Esta situación de la pandemia nos llevó a pensar más allá, por eso seguimos generando trabajo desarrollando estos nuevos productos.